Dios habla en lo cotidiano

Es muy probable que a otros les haya pasado también que piensan que Dios no les habla. Con el tiempo he aprendido sencillamente que si estás cultivando una relación con Dios lo que sucede es que no estás bien sintonizado para escuchar lo que Él está diciendo porque estás muy distraído o preocupado con los asuntos  pasajeros.

No digo que yo siempre esté en la frecuencia correcta pero me han pasado esos "de repentes".

Tal como el otro día, estaba haciendo ejercicio en una bicicleta estacionaria y frente a mi una ventana que daba hacia una calle. Era entretenido mirar a los transeúntes porque así los minutos se movían más rápido. Fue cuando de un momento a otro vi un árbol verde en mis narices, sus hojas parecían las del árbol de maple. De verdad que me llamó la atención el verdor de las hojas. Seguidamente pude ver que en el borde de la ventana habían muchas hojas secas del mismo árbol....claro, era evidente el cambio de estación pero de pronto escuche esa voz dentro de mi que dijo: "VES COMO HAGO LAS COSAS NUEVAS" y eparte de ser un mensaje directo a mi corazón, entendí que Dios siempre está presente, desde lo más cotidiano y simple hasta lo más complicado.